miércoles, junio 23, 2010

SIN PENA NI GLORIA


La verdad es que pensaba que iba a doler más... Pero no. Creí que la sensación de ausencia iba a ser más duradera, pero resulta que ha sido breve. Supongo que el deseo abrasó mi ser y nubló mis sentimientos haciendo que lo que se me ponía difícil se convirtiera en intenso, confundiendo la realidad con la ficción, agarrándose al antojo humano de querer lo que no se tiene.

Sacarte de dentro ha sido fácil. Cogí el bisturí dispuesta a adentrarme en las profundidades de mi ser lo que hiciera falta para extirparte de allí y resulta que la espina que tanto molestaba estaba en la superficie. Un pequeño corte la ha expulsado, y desinfectarme no ha costado más que limpiar un ligero rasguño. Y por eso sonrío mientras cicatriza, porque ahora sé que no tendrá repercusiones. Y es que ni tu ni yo somos de metal, ni magnéticas, sólo son metáforas de mi romanticismo que espera con ansias volver a sentir. Pero no eras tú, aunque por un momento pensé "Ojala lo fueras".

No es momento de abrazos, ni de despedidas, ni de besos. No tendría mucho sentido. Es momento de mirarte desde la distancia, y de descubrir ese instante en el que miras atrás y piensas que lo mismo no hiciste lo correcto. Y qué quizá los escombros que has podido ocasionar habría que reconstruirlos... No quiero dar lecciones, yo he metido la pata más de una vez, pero escribo lo que pienso y, no sé, es verdad que últimamente trabajo mucho con hipótesis, la intuición siempre me ha funcionado bien. Algo de brujita ha dejado mi abuela en mí.

Hay veces que buscamos el reencontrarnos con el "amor" con tanta fuerza que se crean espejismos, pero a posteriori, cuando volvemos la vista a atrás, vemos que era eso, un espejismo que de repente ya no está. Y así vuelves a ser tan prescindible como lo eras antes, y vuelve la paz. Como diría un gran personaje del cine, "Hasta la vista, baby!"

lunes, junio 21, 2010

LA LEY DEL DESEO

Mientras clavas tu tacón en mi espalda pienso en lo mucho que te odio y en el ardiente deseo que despiertas en mí...


lunes, junio 14, 2010

ESPERO QUE HAYA ALGUIEN...

DESIMANTANDOME POR EL LADO POSITIVO


Voy a hacer una metáfora un poco macabra y que seguramente no gustará a muchos, pero es bastante acertada para lo que quiero contar.

Casi siempre las personas que llegan a una durante su vida lo hacen igual que la espada de un torero cuando va a rematar la faena. Pinchan en hueso, no terminan de entrar... Pero a veces hay una, bien dirigida, que da con el lugar adecuado. Como un bisturí en manos de un veterano doctor.

Es tan difícil lograr que esa estocada sea perfecta que lo normal es marrar y muchas veces hasta se desiste en los intentos. Al final es otro el que mete la puntilla tras la desesperación del que persigue la estocada perfecta. En mi corazón pasa lo mismo, está cubierto de una coraza dura como el hueso del lomo del toro, que tiene pocos puntos flacos, y es muy complicado tocarlos, pero si los tocas, toda mi bravura se viene abajo. Así, has sido tú el diestro que ha acosado mi temperamento hasta dejarme extasiada... Tú, que llegaste sin avisar, tranquila, controlada, inofensiva... Has esquivado mis cornadas, toreando con elegancia y gallardía, hasta llegar demasiado cerca, hasta llegar donde no tenías que llegar. Y ahora derramo sangre por los cuatro costados, y me enorgullezco de lo roja y pura que es, porque es mi ser el que permite que este momento llegue.
Y así me desimanto positivamente, porque te saco de dentro para dejarte en la posición que estabas antes de esta debacle de locura y porque mientras subías escalones siempre pensaba que no llegarías a ningún lado. Por eso te dejaba con una media sonrisa que ascendieras mi escalera. Pero debes ir muy rápido. O tal vez sea yo la que no he sabido desplegar la escalera lo suficientemente alta...

Por eso te saco de mi por el lado positivo, porque por el negativo introduzco mi rabia por el poco autocontrol que he tenido... Porque por el negativo me duele la fuerza que tengo que hacer para seguir borrándote y separándote de mi.

Fantasmas que vuelven a ulular a mi alrededor...